Artículo de Consuelo Ordóñez

¿JUSTICIA?
¿Por qué cuando se habla de reforma de la ley penal y penitenciaria no se hace pensando en los derechos de las víctimas? ¿Por qué la sociedad permite alegremente que un Consejero de Justicia del Gobierno Vasco, desautorice a los jueces cuando no le gusta sus decisiones, y proponga tan frívolamente que los presos por terrorismo, deberán salir en dos años de las cárceles, imitando el proceso irlandés? ¿Por qué no se cuenta que en España el cumplimiento medio de prisión hasta la fecha han sido de diecisiete años, independientemente del número de crímenes cometidos por los terroristas?, ¿Por qué los crímenes prescriben a los veinte años ante delitos irreversibles? ¿Por qué no se recuerda que la impunidad fue el regalo del estado a los polimilis, y que en estos casos, como en tantos otros, el estado fue generoso con derechos que solo a las víctimas de aquellos les correspondía? Creemos que las víctimas ya hemos sido inmensamente generosas, ¿Por qué las medidas de gracia o los beneficios penitenciarios no se consideran medidas políticas? ¿Por qué tantas víctimas estamos tan preocupadas en el momento presente, por la efectividad del cumplimiento de las condenas? ¿Qué Justicia puede haber si una sentencia no se cumple?. ¿Por qué se agobia a las víctimas hablando de reconciliación, perdón, generosidad, etc. y no se habla de arrepentimiento, reconocimiento del daño, culpa, responsabilidad? ¿Por qué las víctimas que siempre hemos estado del lado de la democracia somos más molestas, que los que han utilizado el terrorismo o sus justificaciones para reírse del sistema, y amargarnos la vida? ¿Por qué en el supuesto de que dejaran de matar definitivamente, tantos vascos pensarían que ya estaba todo resuelto? ¿Y las deudas pendientes de los prófugos, los preescritos, los no identificados? ¿Por qué, solo por dejar de matarnos se les debe de premiar y a nosotras, su víctimas, castigar? Son demasiados muertos, demasiados heridos, demasiados exiliados por demasiados criminales, que todavía no han pagado por lo que libremente decidieron cometer sin necesidad alguna salvo, la materialización de su fanatismo nacionalista. Hasta que estas preguntas no se respondan institucional y colectivamente, no acabará el sufrimiento de las víctimas y por lo tanto no habrá paz.

Consuelo Ordóñez Fenollar - Hermana de Gregorio Ordóñez Fenollar, cobardemente asesinado por ETA el 23 de enero de 1995.